Satoshi Kitamura, mostró en la Filbo como una sonrisa solo se puede intercambiar y compartir

Satoshi Kitamura, reconocido ilustrador japonés, fue uno de los invitados destacados en la Feria Internacional del Libro de Bogotá. Su visita incluyó charlas y talleres, resaltando además de la universalidad de sus creaciones su permanencia en el tiempo.


Por Jenny Marcela Rodríguez Rojas*


Unos grandes ojos redondos miran a través del vidrio de una juguetería, una mano toca la vitrina mientras la otra tiene su puño fuertemente apretado. El personaje de esta imagen es un niño, el protagonista de La tienda de sonrisas, libro de Satoshi Kitamura publicado en español por Panamericana Editorial.

Su viaje en el mundo editorial inicia en Japón trabajando como ilustrador freelance para publicidad y revistas, sin embargo, su sueño era conocer el mundo, así que con 23 años decide viajar a Inglaterra, estando allí y apenas arrancando la década de los ochenta ilustra su primer libro, Angry Arthur (1983) escrito por Hiawyn Oram.


Satoshi Kitamura (Foto: Editorial Panamericana)
Satoshi Kitamura (Foto: Editorial Panamericana)

Poco a poco y gracias a los amigos editores que conoció en la librería Bernard Stone’s en Covent Garden, le envían diferentes tipos de textos, desde infantiles hasta poemas para que los ilustrara y Voilà, así empieza el camino que lo traería, más de cuarenta años después a La tienda de sonrisas.

Del enojado Fernando al pequeño que se pasea por las calles del vecindario buscando en qué gastar las monedas, Satoshi Kitamura ha regalado a los lectores muchos personajes desde un niño que abre las ventanas de la imaginación en En el desván, pasando por Igor, Pablo, Ardilla, Pedro, animales que han sido figuras centrales de las historias más animadas y claro, su emblemático Gato, protagonista de ¿Yo y mi gato?, aunque más de una vez se ha asomado en otras publicaciones, por ejemplo en Capitán Toby.

Para el mercado en español Panamericana Editorial publica La tienda de sonrisas.  La historia comienza en un mercado muy transitado, niños y adultos se pasean por los diferentes puestos de venta de alimentos y mercancías y allí, en el centro, un pequeño con bufanda roja lleva en sus manos un gran botín, unas cuantas monedas que servirán para comprar… ¿un pastel, un instrumento o un reloj? pero los planes no salen tan bien, pues tal como nos recuerda Julián Acosta Riveros, editor de La tienda de sonrisas “si quieres hacer reír a Dios cuéntale tus planes”.


Portada del libro La tienda de sonrisas (Foto: Editorial Panamericana)
Portada del libro La tienda de sonrisas (Foto: Editorial Panamericana)

La tienda de sonrisas es una obra rica en imágenes que, con unos trazos sencillos sus colores elevan al protagonista, permiten al lector acompañarlo por los lugares del mercado sonriendo junto con el niño a pesar del infortunio. Además, Kitamura ha escondido detalles especiales tanto de su vida como de sus personajes  pasados en sus páginas, al mejor estilo de los easter eggs, desafiando a los lectores a descubrirlos.

Un aspecto para resaltar es la cuidadosa traducción de la obra de Kitamura que preserva la esencia de cada palabra, asegurando que la historia mantenga su magia  en nuestro idioma. Según nos cuenta Julián, a veces lo que rimaba o sonaba bien en  inglés no era así en español, “íbamos oración por oración para que no se perdiera el sentido, que tuviera una cierta musicalidad, una ciertas, una cercanía con el lector”. Otro cuidado especial en esta edición es la portada, aunque pareciera igual a la versión original publicada por Scallywang Press, hay un detalle que es tarea de cada lector encontrar.

Los mundos creados por Kitamura trascienden las fronteras de la edad, invitando a todas las personas a identificarse con sus historias y personajes, demostrando así que la ilustración es un lenguaje universal que nos conecta.

Satoshi Kitamura visitó Colombia para la edición número 36 de la Filbo, encontrándose con viejos amigos como el escritor Rodrigo Morlesin en una “Colisión de asteroides” y con Claudia Rueda en “Cuando todo es mágico o sobre los universos fantásticos de la infancia”. Además, en la franja Filbo Ilustra, el japonés dictó un taller de cuatro horas dirigido a ilustradores. Pero lo más maravilloso fue el encuentro con niñas y niños lectores tanto en la feria como en varias librerías de la ciudad.


Una sonrisa, mil sonrisas (Foto: Satoshi Kitamura, Editorial Panamericana)
Una sonrisa, mil sonrisas (Foto: Satoshi Kitamura, Editorial Panamericana)

*Texto seleccionado en el “Taller de reseñas de libros para medios digitales”, dirigido por el periodista cultural Santiago Diaz Benavides en alianza con la Revista Libros & Letras, edición digital.