Qué sencillo desastre el de la tarde
Qué sencillo desastre el de la tarde
Qué fácil para ella
hacer su catástrofe de luz
todos los días.
Si el buitre de la noche se levanta
y llena el cielo de miradas pardas;
si el águila del amanecer abre sus alas
y tiñe de pan los arreboles,
podré alguna vez pintar de olvido
las extremas comarcas de mi melancolía.