No. 7.055, Bogotá, Martes 5 de Mayo del 2015
Gran éxito de la FILBo 2015: Colombia quiere leer
Por: Prensa Filbo. Y tú, ¿cómo te imaginas Macondo? fue la pregunta lanzada a todo el país, cuya respuesta fue multitudinaria. La asistencia masiva a la FILBo 2015, que alcanzó las 520 mil personas durante los 14 días del evento, batió récord histórico y contestó la pregunta sobre cómo los colombianos visualizaban este territorio mágico como un lugar personal y propio donde la lectura abre la ventana a una segunda oportunidad sobre la tierra.
“Queremos una educación que nos abra al fin la segunda oportunidad sobre la tierra que no tuvo la estirpe desgraciada del coronel Aureliano Buendía. Por el país próspero y justo que soñamos: al alcance de los niños”. Gabriel García Márquez
A sus 14 años, justo cuando estaba a cinco minutos de entrar a la FILBo 2015, María Alejandra Melo les dijo a sus padres que no cabía en sí misma de la emoción.
Luego agregó una frase tan memorable como algunas de las que estaba a punto de encontrar en los 120 mil títulos disponibles dentro de la 28ª Feria Internacional del Libro de Bogotá: que su cuerpo le parecía “demasiado pequeño para tanta alma” desbordada por el vértigo de los libros. A su espalda tenía un morral dispuesto a llevarse cargado de vuelta y traía dos títulos desde su casa para que sus autores favoritos se los firmaran.
Ella es el símbolo de lo que ocurrió en la FILBo 2015: el vértigo de los libros y la apuesta por una segunda oportunidad sobre la tierra a partir de la lectura y la educación –tal como lo soñó Gabriel García Márquez– se hizo realidad de una manera masiva.
En total, durante los 14 días de la feria, 520 mil personas visitaron la feria, representando un récord histórico de asistencia al evento más concurrido del recinto ferial. Por su parte, las editoriales calculan que este año las ventas crecieron un 16 por ciento frente a su participación en 2014.
La rueda de negocios, celebrada en alianza entre ProColombia, la Cámara Colombiana del Libro y Corferias, contó con 114 compradores internacionales y 84 empresas participantes. Se estima que las expectativas de negocio alcanzarán una cifra cercana a los 12 millones de dólares. En total, participaron 157 exportadores colombianos y 103 empresas nacionales.
Asimismo, países como Alemania se hicieron presentes de nuevo en la feria, a través de los representantes de la Feria de Frankfurt y el Instituto Goethe, dado su interés en revitalizar el mercado con Colombia, junto con nueve expositores más que ocuparon el pabellón internacional como Portugal, Perú, Chile, Cuba, China, Ecuador, Brasil y el Parlamento Andino.
Más de 170 autores nacionales e internacionales participaron en los cerca de 1.500 eventos dispuestos para el público en franjas como ‘Conversaciones que le cambiarán la vida’, ‘¡Que viva la música!’, ‘Libros para comer’, el ‘VII Encuentro Internacional de Periodismo’ y los ‘Foros del Libro’, y eventos como el de Fundalectura o el pabellón de Alejandría Digital. El concurso de relato breve de la FILBo reportó además 805 inscritos.
El gran epicentro de la feria fue el pabellón de Macondo como Invitado de Honor, que fue posible gracias al apoyo del Ministerio de Cultura, la Secretaría de Cultura de Bogotá y el IDARTES, donde los visitantes acudieron masivamente a ver la reinterpretación de este universo mítico por parte de los tres artistas colombianos Laura Villegas, Santiago Caicedo y Andrés Burbano y del trabajo curatorial de la escritora Piedad Bonnett, el director de la FNPI Jaime Abello Banfi y el especialista Ariel Castillo.
Estos son, según Enrique González, presidente de la Cámara Colombiana del Libro, y Andrés López Valderrama, Presidente Ejecutivo de Corferias, los mayores hitos que deja esta feria.
Los jóvenes están leyendo más. No solo llenaron auditorios sino que acudieron masivamente y compraron más libros que nunca antes.
Macondo les llegó a los colombianos y la FILBo hizo historia al convertir este territorio imaginado en el Invitado de Honor. Nunca se había visto tanto interés en el pabellón de un invitado. El voz a voz fue crucial para el éxito de la feria.
Las editoriales reportan un estimativo inicial de un 16% más de ventas de libros frente a la versión anterior.
Vale la pena destacar la presencia de las universidades. A diferencia de años anteriores, su propuesta fue más allá de la promoción para incursionar de lleno en la publicación de obras de gran calidad que el público detectó y compró.
Los editores independientes cobraron fuerza y llevaron propuestas de libros nuevos con una impecable puesta en escena. Lo que empezó como una aventura para la gran mayoría de las editoriales hace unos años ahora es un oficio que cumplen con total profesionalismo.
Las artes conexas con la literatura ganaron presencia. Hubo actividades que involucraron la música con las letras, el teatro con la literatura, la gastronomía con los libros y en general, las artes de todo tipo con los textos escritos. Esto hizo de la FILBo un evento cultural completo en el que prima la literatura pero se interactúa con otras artes.
La cifra de asistentes superó todas las expectativas al convocar en 14 días de feria cerca de 520 mil personas. De esta forma se ratifica la importancia del evento cultural y la convocatoria que tuvo la feria.
El precio de la taquilla ha permanecido inalterado durante tres años y el público agradece el bajo costo de asistir a este evento cultural.
William Ospina, Héctor Abad y Tomás González, tres de los más relevantes autores de las letras colombianas, presentaron sus novedades en la FILBO, y hacen parte de los títulos más vendidos.
Hubo escritores nuevos, firmas reconocidas, lanzamientos permanentes y el público siempre encontró actividades para realizar.
Ahora el siguiente paso de este esfuerzo conjunto entre Corferias y la Cámara Colombiana del Libro es que las personas lean sus adquisiciones y que la obra de Gabriel García Márquez quede posicionada en la mente de los que vinieron.
Esta edición de la FILBo cierra con gran éxito en asistencia sus páginas por este año, y da vuelta a la hoja con la satisfacción de una historia muy bien contada. Abriremos más páginas de mediados de abril a principios de mayo en 2016 con Holanda como país Invitado de Honor y la certeza de que el asombro de los visitantes será siempre la mayor recompensa.