Bogotá. El Premio Nacional de Periodismo en la modalidad de Reportaje en Radio, Carlos Castro, de Caracol Radio, dialogó con Plinio Apuleyo Mendoza respecto a su novela Entre dos aguas (Ediciones B).
– Reaparece Plinio Apuleyo Mendoza en la literatura con Entre dos aguas, una novela que tiene mucho que ver con él mismo, que tiene que ver mucho con sus lugares favoritos como son Francia y obviamente Colombia. ¿Qué podemos saber de esta novela?
– Que recoge dos experiencias mías. Una es que realmente he vivido muchos años en Europa, tal vez más de 30 años y he dejado allí muchos
recuerdos, muchas vivencias, pero por otra parte, jamás he perdido el contacto con Colombia y sobre todo con la Colombia dura, una Colombia que vive una situación de lucha armada en las regiones más distantes. Entonces esos personajes están divididos en dos hermanos que han tenido una vida muy opuesta, muy distinta. Uno que se quedó para siempre viviendo en Europa y otro que entró al Ejército y que le ha tocado vivir las situaciones más duras. Entonces he buscado la manera de que esas dos experiencias se encuentren y entonces alterno las memorias de uno con la realidad que va descubriendo las pistas de su hermano y… en fin, es una estructura bastante especial, bastante compleja, que se mueve en el tiempo en el pasado en el presente y en distintos lugares. Pero es difícil hacer una síntesis del libro así a primera vista.
– Esta obra tiene mucho que ver con su vida personal ¿Qué tanto está esa realidad plasmada en la novela y qué tanta ficción hay?
– No. Yo pienso que toda novela tiene un fondo autobiográfico pero es también ficción, es decir, que uno transforma esa experiencia o esas vivencias tal como lo puede imaginar. Toda novela es al tiempo autobiografía y ficción, se mezclan las dos cosas y yo creo que es el caso también de mi novela.
– ¿Esta obra aparece después de un trabajo de cuántos años?
– Unos cuatro o cinco años, tal vez.
– ¿Por qué lo habíamos tenido tan alejado de la literatura?
– No. No creo. Bueno, de la ficción si. Mi última novela se llama Cinco días en la isla y efectivamente fue publicada hace ocho años. Pero no hay que olvidar que después he publicado libros de otro tipo, ensayos políticos como coautor con Carlos Alberto Montaner y Álvaro Vargas Llosa que son: Manual del perfecto idiota Latinoamericano, Fabricante de miseria, El regreso del idiota, etc., pues esos libros han sido escritos después de esa última novela, de la penúltima novela, digamos.
– Una persona que hace novelas que hace obras como Entre dos aguas pero que también al mismo tiempo escribe ensayos políticos, temas relacionados con la cruda realidad de nuestro país desafortunadamente, no hay que preguntar cuál le gusta más pero sí ¿en cuál se siente más cómodo escribiendo?
– No. Yo creo que en realidad la novela expresa algo más profundo menos inmediato. Para mí el periodismo es un arma de lucha, de combate frente a una realidad que estamos viviendo y que lo obliga a uno a pronunciarse en un sentido o en otro. Es una necesidad desde luego. Pero si se trata de ver qué le resulta más grato a uno, pues yo pienso que es la ficción porque la ficción rescata recuerdos, memorias, vivencias antiguas, es algo más profundo y más comprometedor para uno.
– La novela está escrita en primera persona.- ¿Es fácil para el diálogo o cómo es?
– No. La novela está escrita en tercera persona pero alterna también la primera persona. Es en tercera persona y tiene por momentos la atención de una trama casi policíaca mientras se descubre qué pasó, cómo murió uno de los personajes. Pero al mismo tiempo es muy evocativa y en esa evocación viene en primera persona porque uno de esos personajes de noche, escribe su diario, sus memorias y esas memorias aparecen en la novela. De modo que se alterna primera y tercera persona y se alternan tiempos también, el presente y el pasado.
– Si la tuviéramos que apartar para ordenarla en la biblioteca, ¿la pongo en novela policíaca, Novela Negra o en qué parte la pongo?
– No. Yo no la pondría jamás en novela policíaca, ni en Novela Negra. No, pues qué podría decirle, en las novelas que evocan una vida y que se mueven en distintos espacios geográficos. Pero no podría decirle exactamente dónde colocarla, en todo caso, no es una novela policíaca.